Nadie escapa a la crisis del coronavirus. De uno u otro modo la pandemia está afectando a todos los sectores de una sociedad globalizada como la actual. Todo tiene sus pros y sus contras, y la constante relación intersectorial ha hecho que la epidemia haya alcanzado una trascendencia mundial y transversal. De hecho, el deporte en general ha visto cómo su dinámica habitual ha resultado condicionada y competiciones como la Liga Femenina Endesa, pese a que en el mundo del baloncesto casi todos los países han resuelto sus campeonatos, aún mantienen la incertidumbre sobre la resolución que adopte la Federación Española de Baloncesto (FEB).
Con esa duda vive ahora el entrenador del Embutidos Pajariel Bembibre, Pepe Vázquez, que está en la localidad lucense de Sarria con su pareja pasando estos días de cuarentena. Recuerda que “todo se desencadenó de forma quizá muy precipitada. Un día estábamos preparando el partido contra Valencia Basket, después nos tuvimos que hacer a la idea de que jugaríamos sin público, después afrontamos la suspensión cautelar –no sabíamos si sería por unas jornadas, matiza- y por último el cese de la actividad”, resume el preparador gallego, que indica que “paramos los entrenamientos y todos, entrenadores y jugadoras, nos fuimos a nuestras casas sin casi saber lo que estaba pasando”.
De hecho, el técnico de Santiago de Compostela admite que “se tomaron decisiones en función de lo que iba ocurriendo, de lo que sería mejor para el conjunto. Las vidas de las personas están por encima de cualquier competición”, resalta el míster del cuadro berciano, que añade que “en mi caso fue un viaje cómodo porque estoy en Galicia y vine con una maleta pequeña. Tengo mis cosas en Bembibre y estoy a la espera de ver qué se decide desde la FEB”, especifica.
Sobre la pandemia: “No pensaba que pudiera ser tan grave”
Por suerte –si se puede considerar así–, reconoce Vázquez, “en Galicia se está llevando bien, no hay un gran foco de contagio. Supongo que se estará pasando más o menos como en el resto del país”, puntualiza el técnico gallego, que asegura que “estoy en Sarria con mi pareja porque mis padres son mayores y no quiero que haya ningún riesgo. No pensaba que pudiera ser tan grave”, reconoce el míster de la escuadra del Bierzo Alto, que cree que “nadie pensaba que el virus fuera a alcanzar la magnitud que ha alcanzado. Se hablaba de que sería una gripe más potente, más contagiosa, pero nadie pensaba que fuera lo que ha sido”, insiste el compostelano, que opina que “seguro que no ha habido la información necesaria y nos dejamos llevar por la que nos llegaba”.
El santiagués, eso sí, considera que la gravedad de la situación nos hará más fuertes como sociedad: “Son pruebas que te pone la vida. Haciendo un símil deportivo, es como si en una temporada llega una dificultad muy grande y un buen equipo tiene que sobrellevarla y saber superarla”, comenta el entrenador del cuadro rojillo, que opina que en el deporte, aunque con evidente distancia, también se dan situaciones de adversidad: “Un ejemplo son todas las dificultades que hemos encontrado como club y equipo esta temporada. Tenemos que tirar hacia delante y sacarlo juntos”, enfatiza el míster gallego, consciente de que “ahora toca estar en casa, cuidarse. Pronto estaremos todos juntos porque lo habremos superado”, sentencia.
“La formación es continua y tienes que seguir trabajando cada día”
Mientras la FEB concreta la resolución de la temporada, Vázquez aprovecha estos días, aparte de distraerse con actividades de ocio, para cerrar la temporada. “En el día a día, con mi pareja, no nos levantamos tan pronto como habitualmente”, explica el míster santiagués, que afirma que “nos despertamos más tarde para tratar de hacer el día más corto. Puedo hacer limpieza, ver series –estamos ocupados con ‘La casa de papel’, bromea-, películas, hacemos juegos de mesa, cartas, hemos hecho un puzle…”, enumera.
El adiestrador del equipo de la villa del Boeza, eso sí, no deja de lado su dedicación y evidente gran pasión: el baloncesto. “Sigo con mi formación: veo algún clínic que tengo descargado o alguno online que se está organizando”, asegura Vázquez, que añade que “estoy preparando la memoria de la temporada, recopilando las cosas que hemos hecho bien y las que hay que mejorar. La formación es continua y tienes que seguir trabajando cada día”, subraya.
La reanudación, inviable: “Habría muchas jugadoras que no podrían venir”
Ese trabajo, sin embargo, parece muy complicado, teniendo en cuenta que todas las competiciones en Europa se han cancelado, que se concrete en el presente ejercicio. Vázquez, de hecho, apunta que “veo difícil, casi imposible, que se pueda reanudar la competición. El Gobierno ha pedido al Congreso una nueva prórroga del estado de alarma y debemos estar confinados de manera estricta”, recuerda el adiestrador gallego, que agrega que “es muy posible que la opción de recuperar la rutina se lleve a cabo de manera paulatina. No creo que se permita una práctica deportiva y menos con público”, certifica.
No es la única dificultad, de hecho, que ve el técnico gallego, que afirma, además, que “después está el tema de la reincorporación, pues las jugadoras necesitan una pretemporada. Si eres jugadora, no puedes descuidar tu forma dentro de lo que se puede hacer en estas circunstancias”, aclara el preparador del cuadro bembibrense, que ve, asimismo, problemas burocráticos: “También está el tema de los visados, pues hay que saber cómo están las restricciones en el extranjero. Habría muchas jugadoras que no podrían venir”, argumenta. “Estamos con incertidumbre, tratando de cerrar cosas de esta temporada”, precisa el técnico compostelano, que lamenta que “no podemos pensar en la próxima temporada por esta incertidumbre”.
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