Aún sin poder contar con Djénéba N’Diaye, que regresa este lunes a España desde la capital serbia, Belgrado, tras disputar la fase de clasificación para la Copa Mundial de este año, Embutidos Pajariel Bembibre ha vuelto a los entrenamientos después de una semana de parón tras el partido frente al Valencia Basket para preparar una semana con doble compromiso, el jueves en la cancha de Campus Promete y el domingo en la pista del Innova-tsn Leganés. El técnico del conjunto berciano, Pepe Vázquez, se siente “muy contento a nivel de trabajo, ganas y ambiente dentro del equipo. Las chicas han vuelto con mucha actitud, con muy buena predisposición al trabajo”, resume.
El míster de Santiago de Compostela percibe, eso sí, un punto de preparación diferenciado: “Hay jugadoras en distintos niveles, ya que algunas vienen de superar el COVID y las posteriores vacaciones y se nota la inactividad. Las jugadoras que vienen de jugar han descansado y han visto a sus familias, por lo que vienen frescas de cabeza y físicamente”, explica el preparador gallego, que añade que este descanso “era una necesidad física y de salud por el brote que tuvimos e incluso por algún caso sufrido en este parón. Mentalmente estamos bien porque algunas han podido ir a sus casas a ver a sus seres queridos”, reitera.
Djénéba N’Diaye, “un motivo de orgullo” para el club
Una de las jugadoras a las que se refiere Vázquez es Djénéba N’Diaye, que no pudo jugar frente a Valencia Basket y que participó con su selección, Mali, en la fase de clasificación para el Mundial que se celebrará en Australia del 22 de septiembre al 1 de octubre. En este sentido, afirma el míster del cuadro bembibrense que “es un motivo de orgullo para el club que una jugadora represente a su selección. En su caso le vendrá bien porque ha tenido entrenamientos y partidos”, apunta el adiestrador santiagués, que añade que “después de superar el COVID le vendrá bien para recuperar el ritmo de competición”.
La base africana, sin duda, es una de las sensaciones de la temporada y artífice de la mejoría del equipo tras un inicio complicado. La situación del equipo rojillo actualmente es buena, con cinco triunfos y fuera del descenso, aunque el míster de la escuadra berciana reconoce que le habría gustado “llegar a este momento con alguna victoria más. Nos penalizó el inicio de la competición, pues tuvimos una pretemporada accidentada, con cambios de jugadoras, otras que no llegaron e incluso tener que jugar con siete jugadoras”, recuerda el entrenador del equipo del Bierzo Alto, que admite que “nos costó hasta que remodelamos la plantilla y alcanzamos la normalidad y la velocidad de crucero con las once jugadoras”.
Prevé una segunda vuelta “igual de disputada, interesante y complicada”
De hecho, cree Vázquez que “prácticamente tiramos seis partidos a la basura –no los tiramos porque las jugadoras trabajaron bien, matiza– por esas dificultades. Ahora estamos en una regularidad competitiva que nos lleva a ganar y a perder partidos”, puntualiza el adiestrador de la formación rojilla, que cree que “el equipo está compitiendo bien”. Por ello, se muestra “contento con la situación”, si bien considera que “no hemos hecho nada y queda lo más duro. Tenemos que apretar mucho, no podemos bajar el nivel e incluso debemos aumentarlo”, apostilla.
Vázquez es consciente del nivel de la Liga Femenina Endesa y recuerda que “cada año es más difícil. Hay un ramillete de equipos que estamos muy igualados, ya que puedes ganar dos partidos y te ves cerca del play-off y perder dos y te ves en peligro”, argumenta el preparador compostelano, que añade que “es una competición muy bonita, muy disputada. Se presume una segunda vuelta igual de disputada, interesante y complicada que la primera”, agrega el técnico del equipo berciano, sabedor de que “hay equipos que se están reforzando, que se han reforzado y que se reforzarán. Llega el momento decisivo y todo el mundo tiene que estar a su máximo nivel”, rubrica.
Con trece partidos por disputarse y sólo cinco en el Bembibre Arena, se presume clave que los seguidores se muestren tan intensos y metidos en los encuentros como en la última victoria, ante Baxi Ferrol. En este sentido, recuerda Vázquez que “apretaron mucho, nos ayudaron. Necesitamos que el Bembibre Arena apriete y nos empuje en los malos momentos”, resalta el técnico gallego, consciente de que “los partidos que tenemos en nuestro pabellón son muy importantes. Es el momento decisivo de la temporada –recibimos a rivales directos como Gran Canaria y Tenerife, precisa– y necesitamos que nos ayude a lograr el objetivo de la permanencia para que El Bierzo pueda disfrutar de baloncesto femenino de máximo nivel por undécimo año consecutivo”, concluye.
Fotos: Mila García, FIBA, Clarinos Tenerife y Club Baloncesto Bembibre.
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