Como ya ocurriera el anterior fin de semana con la visita a Bembibre de un equipo de la cantera del Xuven Cambados, otro club gallego, esta vez Básquet Coruña, tuvo a varios conjuntos de sus categorías inferiores en El Bierzo, donde disputaron tres encuentros de carácter amistoso. Dos de ellos fueron ante escuadras de la cantera del Club Baloncesto Bembibre, que aprovecharon la ausencia de compromisos oficiales dentro de la División Provincial para continuar su puesta a punto de cara a la recta final de la competición. Además, las coruñesas jugaron ante el Club Baloncesto 6,25 en Ponferrada, donde se midieron los respectivos equipos de la categoría Alevín Femenino.
Todo se concentró en el mismo sábado, disputando dos partidos que suponen, sin duda, un paso más en la renovada apuesta del Club Baloncesto Bembibre por el deporte de base. Una experiencia innovadora para la cantera de la entidad del Bierzo Alto, que ha vivido durante estos dos últimos fines de semana jornadas muy importantes para su progresión y para mejorar sus métodos de trabajo. Estos dos encuentros sirvieron para que las jugadoras bercianas pudieran evaluar su verdadero potencial ante chicas de gran nivel de otras regiones, jóvenes promesas del baloncesto gallego que pertenecen una entidad, Básquet Coruña, que tiene un equipo en Adecco Oro y cuenta con una cantera muy importante.
En la pista anexa del Manuel Marqués ‘Patarita’ de Bembibre se celebraron los encuentros para las del Bierzo Alto, primero para el Júnior-Sénior Femenino y posteriormente para el Cadete Femenino. Las de Roberto Carlos Martínez se enfrentaron al Júnior Femenino del club gallego, mientras que las de Raquel Álvarez se vieron las caras con el Infantil Femenino de Básquet Coruña, protagonizando dos duelos llenos de alternativas, apasionantes y con una considerable afluencia de público teniendo en cuenta que se enfrentaban categorías de formación. También estuvieron las coruñesas en Ponferrada, pero en este caso las alevines, que se midieron a las del C.B. 6,25, dirigidas por la jugadora del Embutidos Pajariel Bembibre Sandra Cereijo.
No importa tanto en estas reuniones el resultado como saber aprovechar cada gesto, cada acción y cada instante, detalles que hacen del deporte algo tan divertido. Compiten las jugadoras, claro está, aunque sólo con el afán de disfrutar y pasarlo bien, de conocer gente nueva y compartir sus vivencias en ambientes distintos. Muchas chicas terminan siendo amigas y el intercambio resulta enriquecedor porque aprenden a competir a niveles distintos. Unas entienden lo complicado que es obtener recursos e implicación para tener equipos de formación; otras, por su parte, ven el nivel de juego que pueden alcanzar con sacrificio y entrega. Todo ello, indudablemente, supone una aportación que ayuda a ser mejores deportistas, incluso mejores personas.
Es ésta una forma nueva de trabajar para la entidad berciana, que se apoyó en las buenas relaciones de su cuerpo técnico con los miembros de la dirección deportiva del Básquet Coruña para llevar a cabo esta iniciativa. Uno de ellos, Héctor Piñeiro, que participa habitualmente como monitor en el ‘Chiquibasquet’, el campus organizado por el técnico del Embutidos Pajariel Bembibre, ‘Chiqui’ Barros, se mostró muy agradecido por la posibilidad de estar en El Bierzo. El entrenador del Infantil Femenino de la entidad gallega, de hecho, fue uno más de los que pudieron disfrutar de un inmejorable fin de fiesta, asistiendo junto a sus jugadoras -todos invitados por el Club Baloncesto Bembibre- a presenciar el choque de Liga Femenina entre la escuadra rojilla y Rivas Ecópolis. Como colofón, algunas de las jóvenes deportistas saltaron a la cancha del Bembibre Arena para jugar durante el descanso del encuentro.