El último fichaje del Embutidos Pajariel Bembibre para la temporada que comienza este fin de semana ha sido la estadounidense Amber Melgoza, que se incorporó al club una vez iniciada la pretemporada. La exterior californiana llegó a España el 9 de septiembre con varias maletas de viaje y una mochila cargada de ilusión. De hecho, admite que cuando conoció el interés del club “estaba muy emocionada por tener la oportunidad de jugar en Europa por segundo año. Sabía que España es un lugar increíble”, resalta la jugadora de Santa Bárbara, que añade que “la Liga Femenina Endesa es muy competitiva y eso me gusta”.
La joven jugadora ya ha disputado cuatro encuentros que, aunque ninguno sea oficial, le han permitido conocer algo de lo que se va a encontrar en la Liga Femenina Endesa. Melgoza asume que el nivel de la competición es muy alto: “El nivel de juego en España en los primeros partidos que jugué fue muy agresivo y competitivo. Me recordó al baloncesto universitario”, precisa la escolta estadounidense, que reconoce no saber mucho sobre la Liga Femenina Endesa, aunque es consciente de que “hay muy buenas jugadoras y equipos muy importantes contra los que nos enfrentaremos. Siempre será una buena batalla cada vez que juguemos”, subraya.
La pasada temporada Melgoza jugó en Italia, un campeonato de buen nivel que le permitió conocer el baloncesto FIBA después de firmar una trayectoria muy importante en el baloncesto universitario de Estados Unidos (NCAA). La jugadora norteamericana recuerda que “existen algunas similitudes entre la cultura española e italiana. Algunas de las palabras son muy similares y todos son amables y acogedores”, argumenta la joven deportista, que destaca, además, que “como siempre, la comida es increíble. Se esfuerzan para que sea feliz y me sienta como en casa”, insiste.
“Es una locura cómo el baloncesto puede llevarte a tantos lugares”
La nueva jugadora del Embutidos Pajariel Bembibre cree que el paso por Italia le ha ayudado porque “el cambio del baloncesto de la NCAA a Italia y ahora a España es muy pronunciado. Todos tienen cosas diferentes: en el baloncesto universitario eres un estudiante-atleta, estás cerca de casa y juegas ante tu familia y amigos, mientras que en el extranjero aprendes nuevas culturas, estás sola y conoces gente nueva de todo el mundo. En España conozco a algunas jugadoras con las que jugué en la universidad y de las que soy buena amiga”, incide Melgoza que considera que “es una locura cómo el baloncesto puede llevarte a tantos lugares y, años después, te enfrentas en un país diferente”.
En Bembibre, Melgoza lleva apenas dos semanas. Aunque es una localidad no muy grande, la de Santa Bárbara asegura que está muy a gusto y se siente “muy agradecida de formar parte de este equipo. Todos son muy acogedores, el grupo es muy fuerte y solidario”, enfatiza la jugadora norteamericana, muy feliz por el trato que ha recibido en estos primeros días en el equipo del Bierzo Alto: “Estoy muy agradecida de que este club confíe en mí. Me han recibido como una gran trabajadora y alguien que lo da todo en todo momento”, argumenta la escolta californiana, que asegura que “seguiré haciéndolo así todos los días”.
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