El noveno proyecto del Embutidos Pajariel Bembibre en la élite del básquet femenino español empieza a tomar forma. El club de la villa del Boeza ha alcanzado un acuerdo con la pívot de 188 centímetros de altura Batouly Camara para que unan sus caminos durante la temporada 2020-2021. Internacional por Guinea –cuenta, por tanto, con pasaporte cotonú–, estuvo a prueba con el combinado estadounidense U18 en 2014 y llega a la Liga Femenina Endesa después de jugar en la Liga Universitaria de Estados Unidos (NCAAW) entre 2015 y 2020.
Nacida en la ciudad estadounidense de Nueva York hace 23 años (2 de noviembre de 1996), su trayectoria en la NCAAW comenzó en Kentucky, donde coincidió con la exjugadora de Perfumerías Avenida Evelyn Akhator. Tras este estreno, en 2016 cambió de universidad y fue declarada redshirt, por lo que estuvo un año en blanco. De vuelta a las pistas, se unió a las Huskies de la Universidad de Connecticut (UConn), donde coincidió con otras jugadoras con experiencia en la WNBA como Napheesa Collier, internacional con Estados Unidos; Gabby Williams, que acabó en SPAR Uni Girona el curso 2018-2019; o Katie Lou Samuelson, recientemente fichada también por Perfumerías Avenida.
Un deseo: “Que el Bembibre Arena se identifique con su lucha”
Esto, sin duda, supone aval suficiente sobre una gran formación. De hecho, su nuevo entrenador, Pepe Vázquez, haciendo un símil con el básquet masculino, lo considera como haber jugado en Real Madrid o Barcelona, o en baloncesto femenino, en Perfumerías Avenida o SPAR Uni Girona: “Viene de la universidad con más prestigio y cualquier jugadora que recluta reúne características especiales. No ha gozado de muchos minutos, pero estar en ese equipo tiene mérito”, especifica el compostelano, que sostiene que “es aval de que ha estado bien entrenada, de que tiene cultura deportiva”.
El técnico gallego la describe como “una jugadora muy física, que aporta intensidad y esfuerzo. Defensivamente nos va a ayudar por su intimidación y su capacidad de salto y para taponar”, analiza el preparador del cuadro bembibrense, que considera que “es, pese a su altura y corpulencia, una jugadora con movilidad, versátil, que puede ir al poste bajo y que puede jugar abierta. Jugando de cara puede poner el balón en el suelo”, añade el adiestrador gallego, que destaca de la nueva jugadora rojilla que “puede ayudar en muchas facetas. Su intensidad hace de ella una jugadora especial”, reitera el compostelano, que se muestra “contento por poder contar con ella. Espero que el Bembibre Arena se identifique con su lucha”, apostilla.
Pepe Vázquez asegura, además, que “tiene ambición y mucha ilusión por jugar profesionalmente. Está contenta por tener esta oportunidad”, resalta el míster gallego, que reconoce que “necesitará, como toda jugadora rookie, una adaptación. Al haber jugado con su selección, el baloncesto FIBA lo conoce, aunque sea en pequeñas pinceladas”, aclara el santiagués, que añade que “ahora debe demostrar en el baloncesto profesional todas las características que reúne”.
“Siempre ha sido un sueño para mí jugar al baloncesto profesionalmente”
Esa participación con el combinado guineano, sin duda, fue una gran experiencia para Camara, que admite que “nunca lo olvidaré. Fue un honor y un privilegio jugar con el equipo nacional en Cabo Verde”, explica la nueva interior de la escuadra berciana, que pudo experimentar entonces “la diferencia entre el nivel universitario y el profesional. El baloncesto en Europa es de primer nivel, de los mejores del mundo”, especifica Camara, que admite que “siempre lo he admirado. Se enseña juego con y sin balón desde una edad muy temprana”, explica la jugadora nacida en Estados Unidos, que vivirá de esta forma su primera experiencia profesional en un baloncesto, para ella, “exigente y disciplinado”.
Sobre su nuevo equipo, admite Camara que “lo he conocido más a fondo hablando con el entrenador, viendo vídeos y a través de las redes sociales. Se ha mostrado como un equipo agresivo, activo y que busca una selección de tiro eficiente”, afirma la interior del cuadro bembibrense, que agrega que “tiene un gran entrenador. Cuenta con una amplia experiencia”, precisa la pívot cotonú, contenta por las primeras conversaciones con el preparador gallego. “Mi contacto inicial con el club y el entrenador fue genial”, subraya la exjugadora de UConn, satisfecha por las explicaciones recibidas acerca de la planificación: “Siempre ha sido un sueño para mí jugar al baloncesto profesionalmente. Es difícil imaginar un lugar mejor que España para hacerlo”, concluye.