La jugadora del Embutidos Pajariel Bembibre Cherin Miller alcanzó el pasado sábado, en el duelo de rivalidad regional frente a Perfumerías Avenida, la cifra de 100 partidos en la Liga Femenina Endesa. Tras debutar en la competición con el conjunto berciano en 2012 frente a SPAR Girona, la pívot americana jugó 96 choques repartidos entre Lointek Gernika, Mann-Filter Zaragoza y Durán Maquinaria Ensino antes de regresar a España hace apenas un mes, durante el parón de selecciones de la ventana FIBA.
No han sido sus únicas experiencias en nuestro país, ya que sus primeros partidos los disputó en la Liga Femenina 2 con el Uni Ferrol en la temporada 2009-2010. Volvió a tener dos experiencias más en la segunda categoría culminadas en ambos casos con el ascenso, primero en Gernika y después en Lugo, etapas que le permitieron, además, disputar con el cuadro gallego una eliminatoria de la Copa de la Reina celebrada en 2020 en Salamanca. Fue su último encuentro en nuestro país antes de regresar al club berciano recientemente.
En este sentido, reconoce la neoyorquina que, pese a haber jugado en su país, en Republica Checa, en Francia, Croacia, Ecuador, Israel, Portugal, Rumanía y Turquía, “es un honor alcanzar esta cifra en la máxima categoría de este país. Me encantaría haber ganado, pero fue una gran experiencia jugar contra Perfumerías Avenida con el equipo en el que debuté en la Liga Femenina Endesa”, dijo la interior americana, que se mostró satisfecha por “encontrarme con estos equipos en campeonatos que son muy especiales para mí”.
Asimismo, cree que el baloncesto ha evolucionado desde que inició su carrera profesional: “Desde que dejé la universidad ha cambiado mucho, desde un juego más físico a la personalidad de las jugadoras e incluso las redes sociales. Todo cambia, pero el baloncesto siempre es especial”, recalca la jugadora estadounidense, que considera que “lo realmente importante es la ambición, el orgullo y el amor que expresan las jugadoras competitivas”.
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