El entrenador del Embutidos Pajariel Bembibre, ‘Chiqui’ Barros, participó este sábado en el II Clínic de la Escuela de Entrenadores del Club Baloncesto 6,25 de Ponferrada. Lo hizo ofreciendo una charla, ‘El pase en Minibasket’, que se celebró en el Pabellón Antonio Vecino del barrio ponferradino de La Borreca y en la que el ferrolano expuso una metodología para la enseñanza del pase en el baloncesto de iniciación, aplicable incluso para los jugadores o jugadoras profesionales.
Fue una exposición a la que asistieron alumnos de la Escuela de Entrenadores del C.B. 6,25 e integrantes de sus categorías de base. Tampoco faltaron tres jugadoras del Embutidos Pajariel Bembibre –‘Monty’, Eli Vivas y Anna Gómez- ni la asistente de ‘Chiqui’ Barros en el banquillo del conjunto rojillo, Raquel Álvarez. La participación del preparador gallego en esta actividad constata su implicación con las distintas iniciativas emprendidas en El Bierzo por las instituciones de toda la comarca, y consolida las cordiales relaciones entre el Club Baloncesto Bembibre y estas entidades, en este caso concreto con el C.B. 6,25, que cuenta entre los integrantes de su dirección técnica con Sandra Cereijo, jugadora del Embutidos Pajariel Bembibre.
Al inicio de su explicación, ‘Chiqui’ Barros quiso agradecer a la entidad ponferradina la invitación a estar en esta conferencia, que, según el propio técnico, “sirve para que el baloncesto crezca en El Bierzo”. Ya durante la exposición, el preparador gallego se centró en la metodología para trabajar un fundamento primordial como el pase en las categorías de formación. Para ello, contó el ferrolano con la colaboración de componentes de algunas secciones de la cantera del C.B. 6,25, que mostraron gran interés y muy buena predisposición para aprender los sistemas de trabajo del entrenador del Embutidos Pajariel Bembibre.
Planteó el ferrolano una serie de ejercicios que sirven para mejorar la técnica de pase, implicando con ella distintos fundamentos como la parada, la arrancada, el bloqueo del rebote, el tiro, el bote, el agarre y el manejo del balón, el movimiento sin él,… Todos ellos trascendentales para tener un buen jugador o jugadora, opina el ferrolano, que reivindica la importancia del pase “como fundamento para progresar y del que nacen las ventajas”. Se trata, de hecho, de una faceta capital en los cambios experimentados por el baloncesto desde su nacimiento. Como aspecto vinculado al pase propuso el gallego la buena recepción del balón, para lo cual hizo hincapié en una posición adecuada, conocida como ‘de triple amenaza’, que permite adquirir ventajas una vez recibida la pelota.
Otro punto central, también relacionado con el pase y sin el cual no tendría sentido, sería el individuo, el jugador o jugadora, para el cual pidió el ferrolano “educarlo para que pueda pasar bien y disfrute jugando. El juego lo inventan ellos”, precisó ‘Chiqui’ Barros, que apostó por diseñar ejercicios fáciles de entender y que, al fin y al cabo, posibiliten la consecución del objetivo que se pretende alcanzar. Al ser el jugador el actor fundamental, alrededor del que gira el baloncesto, se debe tener, además, “paciencia para enseñar. Es un arte, para dominarlo se requiere sacrificio”, puntualizó el gallego, que consideró que “para ser buen jugador o jugadora, hay que ser inteligente. Se entrena mejor con talento”, aclaró Barros, que también puso el acento en la capacidad individual para elegir. “No podemos crear buenos pasadores desde el miedo, sino desde la responsabilidad”, afirmó el preparador de la escuadra del Bierzo Alto, que apuntó, asimismo, que “si eres conservador puedes ganar, pero no aprender”, es decir, que se debe trabajar para que el jugador, ya sea en categorías de formación o profesional, pueda tener iniciativa y esté capacitado para decidir. Para conseguirlo, insistió Barros en el núcleo de la exposición, el pase, cuya calidad repercute en la posibilidad de seleccionar mejor en función de la situación generada.
