La afición del Embutidos Pajariel Bembibre se ilusiona con su proyecto de formación

El pasado lunes, en el descanso del partido de Liga Femenina Endesa entre Embutidos Pajariel Bembibre y Lointek Gernika Bizkaia en el que venció (78-75) el equipo berciano, la afición que acudió al Bembibre Arena ofreció una calurosa ovación a las jugadoras que representaron al Embutidos Pajariel Bembibre Hospital de la Reina PDM en la última Minicopa LF Endesa, competición paralela a la Copa de la Reina celebrada en Valencia recientemente en la que el equipo berciano acabó en una meritoria cuarta posición. El reconocimiento era más que merecido por esos tres días de ilusión compartida.

Aunque por compromisos deportivos no pudieron estar todas las integrantes del equipo, posiblemente no había mejor escenario para homenajearlas que el importante partido que disputó el conjunto dirigido por Pepe Vázquez frente al cuadro vizcaíno. Andrea Vicente, Vicky Gómez, Claudia García, Carlota Álvarez, Carlota García Azqueta, Nadia González, Marina Robles, Marta González, Tania Rodríguez, Adriana Urdiales, Irene Alaiz, Nerea Menor y Cecilia Fanjul recibieron su premio en forma de ovación de un público que siempre sabe reconocer el esfuerzo después de diez temporadas en la élite del básquet femenino.

Ese esfuerzo no sólo es deportivo, ya que los entrenadores, Juanma Copano y Carlos González Urdiales, tuvieron que hacer prácticamente malabares para poder conformar el equipo y conjuntarlo en unas escasas sesiones de trabajo. En ellas, además, participaron otras jugadoras como Carla y Ariadna Abelló, Iria Bernardo, Carlota Fernández y Marina Pazo, que elevaron el nivel de los entrenamientos para ofrecer un trabajo de más calidad. Los clubes que cedieron a sus jugadoras (6,25 de Ponferrada, Ciudad de Ponferrada, Baloncesto Femenino León, Colegio Leonés, Estudiantes de Lugo y Colegio École de Asturias) también pusieron de su parte para este éxito rotundo del deporte berciano.

Primer paso para un futuro ilusionante

El éxito no se circunscribe solamente a competir a buen nivel con las mejores canteras de nuestro baloncesto, pues lo fundamental es vivir esta experiencia que constituye la primera piedra de un proyecto formativo iniciado recientemente. La reactivación de las escuelas deportivas del Ayuntamiento de Bembibre se ve complementada con este primer paso para tener acuerdos con distintos clubes cercanos y poner en el radar de un equipo que está en la élite del deporte nacional a jugadoras con un deslumbrante futuro por delante.

Sin ir más lejos, en la anterior Minicopa, celebrada en Salamanca y en la que se impuso Valencia Basket, estuvo Awa Fam, jugadora en edad cadete que ya ha debutado en Liga Femenina Endesa y en la Eurocup con el equipo taronja. Por L’Alquería del Basket de Valencia pasaron en esos tres días que duró la Minicopa jugadoras en edad infantil que representan el futuro de una cantera que cada verano nos da alegrías en campeonatos mundiales y continentales. Ada Toribio, del equipo campeón, Movistar Estudiantes, ya aparece en publicaciones referenciada como una perla llamada a reinar durante lustros.

Una competición emocionante

Fue precisamente Movistar Estudiantes el equipo que apeó de la final al Embutidos Pajariel Bembibre tras una semifinal en la que las pupilas de Juanma Copano acabaron cayendo (58-72) después de un inicio marcado por el extraordinario acierto de las madrileñas, que administraron con solvencia la renta adquirida en este tramo inicial. La representación berciana se impuso sin éxito en los dos últimos parciales, pero el excesivo desacierto desde los 4,60 de las jugadoras del equipo bembibrense pesó demasiado en el resultado final.

Parecido guion describió la lucha por el bronce, en la que ganó (73-65) Clarinos Tenerife después de un tercer cuarto terrible del cuadro berciano. El parcial de 2-15 en los últimos minutos no fue suficiente para la remontada de las rojillas en un choque condicionado por el anterior encuentro, que concluyó apenas una hora antes de este enfrentamiento que dirimió el último puesto en el podio. No tuvieron más descanso las isleñas, pero el desgaste que sufrieron las de Juanma Copano y la lesión de una de sus jugadoras tuvieron su peso.

No pudo rematarse la faena tras una primera fase emocionante, en la que el primer choque, ante Cafés Candelas Ensino, estuvo marcado por el escaso conocimiento interno del equipo berciano. El 45-39 para las gallegas se fraguó en una segunda mitad de mayor nivel físico. Más acopladas, las rojillas –esta vez de rojo– derrotaron (57-15) al Comeplastic Araski para ganar confianza antes del decisivo enfrentamiento en el duelo de rivalidad regional frente al Perfumerías Avenida. Necesitaban las jugadoras del conjunto berciano ganar por 8 y lo hicieron por 40-31 defendiendo los últimos segundos como unas guerreras.

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