La jugadora del Embutidos Pajariel Bembibre Roselis Silva cumplió el pasado sábado, en el choque de su equipo en Maloste frente a Lointek Gernika Bizkaia, 200 partidos en la Liga Femenina Endesa. A sus 31 años, la base venezolana con doble nacionalidad española, que cumple su octava campaña en España, cuenta con más de 200 participaciones en Competiciones de la Federación Española de Baloncesto (FEB). Tras debutar con Añares Rioja, su paso por Kutxabank Araski, Campus Promete y Lointek Gernika y sus tres etapas en Embutidos Pajariel Bembibre la convierten en una institución.
La base de Caracas, además, vive un buen momento de su carrera después de haber sido incluida en un quinteto ideal y haber cosechado el segundo MVP de su trayectoria en nuestro país –primero con la elástica rojilla– esta temporada. Conocida como la “ladrona” de la Liga Femenina Endesa por su habilidad para recuperar balones, sigue siendo líder dentro y fuera de la cancha. En los primeros puestos en la lista de recuperaciones y asistencias, es una jugadora que aporta muchas más cosas de las que reflejan las estadísticas y es muy querida fuera de la cancha.
Todo ello es producto de una evolución como jugadora, pasando de ser una anotadora cuando llegó a España en 2015 a una jugadora más inteligente. Al respecto, asegura que conoce “mejor” la Liga Femenina Endesa: “Tengo más experiencia en la competición y el baloncesto en general. No ha cambiado mi faceta de anotadora, tengo puntos en las manos”, aclara la jugadora, que añade que sí ha variado su “capacidad para leer mejor el juego y hacer jugar más al equipo”. Hablamos, en este sentido, de una de las jugadoras más respetadas por todas las aficiones de nuestro baloncesto.
El bicentenario: “Un encuentro de muchas emociones”
Así se demostró el sábado en Maloste, donde fue recibida con mucho cariño por la que fue su hinchada la pasada temporada. De hecho, pese a la derrota por 71-58, admite la armadora caribeña que “fue un encuentro con muchas emociones. Son 200 partidos en la competición y contra el que fue mi equipo”, argumenta la base venezolana, que siente “orgullo” por alcanzar esta cifra de encuentros en un campeonato al que llegar supuso “cumplir un sueño que tenía desde que jugaba en Estados Unidos. Estaba segura de que España sería el país en el que iba a seguir jugando y creciendo deportivamente”, remacha.
A nivel deportivo, vive el presente con ilusión en una temporada muy buena para la escuadra berciana. Aunque está muy a gusto en El Bierzo, no piensa aún en la próxima campaña. “Como jugadoras, un día podemos estar en un sitio y al siguiente en otro en función de lo que pase en la vida y se pretenda”, argumenta la base caraqueña, que está “centrada en el presente” porque el equipo, con seis partidos aún por disputarse, “está donde quería estar, con cuatro victorias en la segunda vuelta” y aún con opciones de aspirar a cosas más importantes que la permanencia.
Añares Rioja: “Fue un primer paso para cumplir un sueño”
Todo empezó el 27 de septiembre de 2015 con el debut ante SPAR Gran Canaria. Llegó al Añares Rioja, club al que asegura que se siente “muy agradecida” por darle “la oportunidad de llegar a España”. Ya en ese primer encuentro, en el Polideportivo de la localidad guipuzcoana de Azpeitia, destacó con 14 puntos y 11 recuperaciones. La temporada no fue deportivamente muy feliz –culminó con el descenso–, pero supuso, como reconoce la propia jugadora, “un descubrimiento”. De hecho, ya se dio cuenta de que podía ser jugadora profesional: “Fue un primer paso para cumplir un sueño”.
La temporada siguiente, aunque permaneció en Euskadi, se fue a Vitoria para jugar con Kutxabank Araski, donde llegó a disputar play-off y Copa de la Reina el primer año. Asegura que esa etapa “fueron dos años de crecimiento: Empezó a cambiar mi estilo de juego, que pasó de ser un juego más individual –una anotadora, concreta– a una buena organizadora”. Reconoce, de hecho, que disfrutó “mucho del baloncesto” con Madelén Urieta y supo que “tenía que cambiar facetas” de su juego si quería dedicarse al baloncesto de manera profesional, como era su sueño.
Primera etapa en Bembibre: “Tenía ganas de crecer como jugadora”
Bembibre fue la siguiente parada en su carrera. Era 2018 y ya era muy reputada en la máxima categoría del baloncesto español, así que la base de Caracas decidió, para su cuarto curso en nuestro país, “combinar” su experiencia con un entrenador como Pepe Vázquez. En este sentido, asegura que llegó con ambición: “Tenía ganas de crecer como jugadora. Fue un escalón más”, añade sobre su primera experiencia en El Bierzo, en la que ya abanderó la reacción de un equipo que estuvo a punto de colarse en los playoffs –acabó en novena posición– después de concluir la primera vuelta con apenas dos triunfos.
Silva, que ya alcanzó el primer centenario en esa primera etapa en el equipo berciano ante Lointek Gernika pero en el Bembibre Arena, es la segunda extranjera con más partidos en la máxima categoría con el conjunto berciano. Tras superar recientemente los 59 en los que lució la elástica rojilla la finlandesa Marianne Kalin, sólo la irlandesa Orla O’Reilly, que estuvo algo más de tres temporadas en la formación bembibrense, supera los 70 que acumula ya la base caribeña. 75 encuentros –la FEB registró uno más en el que realmente no participó– disputó la escolta de Cork en su etapa en El Bierzo, entre 2013 y 2016.
Primer regreso a Bembibre: “Tenía muchas ganas de jugar al baloncesto”
Ese gran primer año en Bembibre dio paso a una temporada en la que dio el salto competitivo al Campus Promete, un proyecto emergente que, pese a haber desaparecido al inicio de la presente temporada, estuvo a punto en varias ocasiones de disputar play-off y Copa de la Reina. Para Silva fue importante porque supuso “una experiencia con jugadoras top. Tener jugadoras de élite fue una experiencia gratificante”, subraya la jugadora con pasaporte español, que lamenta que fuera “una experiencia corta porque no se pudo acabar la competición” debido a la crisis de la COVID-19 iniciada en marzo de 2020.
La crisis sanitaria afectó a todos e incluso retrasó su vuelta a las pistas. No pudo, de hecho, iniciar la siguiente campaña con el Recoletas Zamora, que la había fichado, y tuvo que esperar a noviembre para volver a jugar con Embutidos Pajariel Bembibre: “Después de jugar en Logroño y lo que pasó con la COVID-19, fue muy importante. Tenía muchas ganas de jugar al baloncesto después de casi ocho meses sin poder hacerlo”, reconoce la jugadora venezolana, que se volvió a erigir en líder de un grupo que, recuerda, “trabajaba bien, pero necesitaba que se confiara en lo que se estaba haciendo”.
Disputó 20 partidos y acabó en el top-ten de jugadoras más valoradas de la competición, lo que le permitió firmar por Lointek Gernika Bizkaia, tradicional ‘outsider’ de la Liga Femenina Endesa, en 2021. Jugó Copa de la Reina y su gran aspiración, competición continental, concretamente la EuroCup Women, con un proyecto muy atractivo: “Me encanta su forma de trabajar con la cantera. El pueblo está muy involucrado”, resalta Silva, que la considera una etapa necesaria: “Era un paso más jugar en uno de los cuatro mejores equipos de España. Competir en Europa fue un paso que me gustaría repetir”, remacha.
Sus entrenadores: “Me han formado como jugadora y como persona”
El pasado verano Pepe Vázquez, actual entrenador de Perfumerías Avenida, volvió a confiar en ella para el undécimo proyecto bembibrense en la élite del básquet femenino español que ahora dirige Diego García. La jugadora opina que el asturiano “lo está haciendo muy bien. Se está adaptando muy bien al nivel de la Liga Femenina Endesa”, precisa la directora de juego nacida en Caracas, que se ve como “una líder más” y valora positivamente el trabajo de todos los entrenadores que ha tenido desde su infancia: “Componen una parte importante de mi carrera. Me han formado como jugadora y como persona”, resume.
Sin embargo, con Pepe Vázquez, el entrenador que más partidos ha dirigido a Roselis Silva en la Liga Femenina Endesa, parece haber establecido una relación especial entrenador-jugadora. Así se demuestra después de apostar por su liderazgo en tres etapas distintas y con plantillas muy dispares. En este sentido, la base venezolana se muestra “muy agradecida” por la confianza mostrada por el preparador de Santiago de Compostela y le desea “la mejor de las suertes” en el cuadro salmantino, al que llegó después de dirigir al conjunto berciano hasta la 17ª jornada del presente curso.
Pepe Vázquez: “Hay muchos intangibles que aporta”
El técnico santiagués recuerda que fue el primer fichaje de su etapa en Bembibre y su renovación un deseo cada de temporada: “Desde el primer año en el que llegué a Bembibre fue un objetivo. Quería que fuese la base titular”, precisa el preparador gallego, que insiste en que en distintas ocasiones trató de conseguir su renovación: “Siempre que he podido he intentado que estuviera en el equipo. Es una jugadora en la que tengo confianza no sólo por su valía –puede anotar, asistir, rebotear, enumera– en la pista, sino por la capacidad de liderazgo y los valores que aporta en un vestuario”, resume.
De hecho, el entrenador del Perfumerías Avenida ve múltiples virtudes en una jugadora “siempre implicada” y que “trata de que el equipo vaya hacia arriba. Siempre sabe lo que necesita el grupo”, resalta el adiestrador compostelano, que hace hincapié en el especial vínculo creado con la base: “Hemos tenido una gran conexión. Ha sabido lo que quería y me ha ayudado a transmitirlo”, enfatiza el míster del conjunto charro, que recuerda que “siempre ha superado con nota las temporadas individualmente para ayudar a cumplir los objetivos. Hay muchos intangibles que aporta”, concluye.
Fotos: Rodo López, Mila García, Agustí Peña, Lointek Gernika, Araski, Añares Rioja y Dani Quiterio.
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